La justicia británica rechaza demanda contra rey emérito español Juan Carlos I de su examante

La Justicia británica rechazó hoy la demanda por acoso contra el rey emérito español Juan Carlos I presentada por su ex amante danesa, Corinna zu Sayn-Wittgenstein-Sayn, que reclamaba 126 millones libras (unos 165 millones de dólares), por considerar que «carece de competencia» para juzgarla.

La empresaria de 58 años, que reside en Inglaterra, había presentado una demanda civil en Londres en 2020 en la que lo acusaba de espiarla y acosarla, alegando que estas acciones le causaron «un gran dolor mental».

La mujer, divorciada de un príncipe alemán y conocida también por su nombre de soltera, Corinna Larsen, mantuvo una relación con el entonces monarca entre 2004 y 2009.

La jueza Rowena Collins Rice, encargada del caso, señaló en una resolución escrita que el «Tribunal Superior de Inglaterra y Gales carece de competencia para juzgar esta demanda».

La conclusión se basó, por un lado, en que el rey emérito está domiciliado fuera de Inglaterra y, por otro, en que la empresaria no demostró que el supuesto acoso hubiera tenido lugar en territorio inglés.

Larsen, que tuvo una presencia destacada en el mundo empresarial británico, expresó su profunda decepción ante esta decisión.

“Es descorazonador ver que las víctimas de acoso a menudo luchan por encontrar justicia en nuestro sistema legal”, lamentó.

Adicionalmente, hizo énfasis en la influencia que Juan Carlos pudo haber ejercido en este proceso legal al declarar que el rey emérito ha usado «todo su arsenal para aplastarla», según consignaron medios británicos.

La relación entre el monarca y la empresaria fue objeto de amplio escrutinio en los medios.

Tras la ruptura, la mujer alegó haber sido objeto de amenazas, vigilancia y allanamientos por parte de Juan Carlos, ahora de 85 años.

Entre otros ataques, denunció «entradas ilegales» en sus domicilios, «la perforación de un agujero en la ventana de su dormitorio mientras dormía», el 21 de junio de 2017, y disparos a sus cámaras de seguridad, el 14 de abril de 2020.

En diciembre pasado, el Tribunal de Apelaciones ya había sentenciado que Juan Carlos, debido a su estatus como monarca durante el período en cuestión, gozaba de inmunidad, cerrando la posibilidad de presentar demandas en su contra por los eventos ocurridos durante su reinado.

Por su parte, el rey emérito español emitió un comunicado expresando su alivio ante la reciente sentencia.

«Si bien lamento el desembolso de energía y recursos en este proceso, saludo la decisión del Tribunal Superior de Londres que, como era de esperar, confirma mi inocencia», sostuvo.

También aclaró que, durante todo el proceso, mantuvo un perfil bajo para permitir que la justicia actuara con imparcialidad.

Nombrado jefe de Estado en 1975 a la muerte del dictador Francisco Franco, Juan Carlos I fue respetado durante décadas por permitir el retorno de la democracia a España.

Sin embargo, una serie de escándalos a partir de 2012, incluida su relación con Larsen, derrumbaron su imagen, llevándolo primero a abdicar en favor de su hijo, Felipe VI, y en agosto de 2020, a exiliarse en los Emiratos Árabes Unidos, donde vive desde entonces.

Entradas relacionadas